¿Qué hacer?
Coge una pequeña cesta de mimbre, o un bol grande, que contenga objetos muy diferentes. El niño tendrá que separarlos e identificarlos según sean objetos rugosos, blandos, ligeros, pesados, lisos, elásticos, esféricos, cúbicos, etc. Estimule también el sentido del olfato, ponga fruta en la cesta (por ejemplo, naranjas o limones que huelen muy bien), ¡el niño quedará fascinado y estimulado en todos sus sentidos!
¿Qué podemos poner ahí?
Conos de pino, conchas marinas, esponjas naturales, cáscaras de coco, ovillos de lana, trébedes de paja, brochas de afeitar, cepillos de dientes, peines de madera, cepillos, sonajeros, pinzas para la ropa, anillos para cortinas, cucharas, batidores de cocina, cacerolas, cajas metálicas de tamaño pequeño o mediano, tapas de tarros de mermelada, moldes de galletas, polvorones, trozos de tubos de goma, pelotas de tenis, paquetes de tela bien cosidos con lavanda, tomillo y clavo.
